Las vías de ingreso de los clubes de esports a debate: ¿qué caminos están siguiendo para diversificar sus líneas de negocio? Lo analiza nuestro director de innovación, Juan Arano.
SEPTIEMBRE | TAGS: La mirada disruptiva, 100 Thieves
Las historias de éxitos empresariales no siempre acaban como empiezan. Ejemplos hay a montones: ¿o Starbucks no empezó vendiendo máquinas y granos de café expreso?, ¿o Suzuki no empezó produciendo máquinas textiles?, ¿o el fundador de Avon no era un vendedor ambulante de libros que llevaba muestras de perfumes de regalo para sus clientes, hasta que se dio cuenta de que las mujeres valoraban más sus perfumes que sus libros?
Historias como éstas hubo, hay y habrá muchas a lo largo de la historia. Pivotar está en el ADN empresarial desde siempre y los esports parecen no ser la excepción.
Más allá de que, en este caso, la actividad principal (o deportiva) se mantiene y es realmente innegociable -o eso parece, ya que es lo que les acerca a las audiencias-, los equipos de esports saben que los premios potenciales por participar en competiciones oficiales no bastan para pagar las cuentas y, por otro lado, saben que depender sólo de las aportaciones económicas de las marcas conlleva demasiado riesgo como para no buscar fuentes de diversificación.
En este contexto, cada uno va buscando un posicionamiento que le permita canalizar el alcance y el engagement de su actividad para obtener fuentes de ingresos alternativas a la propia actividad deportiva. ¿Y cuáles son esas fuentes de ingreso alternativas? Depende del caso, pero la mayoría se debaten entre la tecnología, la web3, los medios y los contenidos y el lifestyle. De todos los casos, hoy me detendré en el último de la lista: el lifestyle.
100 Thieves, “la marca premium de estilo de vida y organización que se dedica al gaming”
¿Cómo puede un equipo de esports pivotar hacia una empresa que se dedica a reflejar un estilo de vida? Hay un ejemplo que vale más que mil palabras: 100 Thieves, que se autodefine como “la marca premium de estilo de vida y organización que se dedica al gaming”.
La segunda compañía mejor valorada según el ranking Forbes, que alcanza los 460 millones de dólares de cotización, ha dado un salto de gigante en la diversificación de su modelo de negocio, tal como lo hizo Faze Clan, que se evidencia en su propia definición y que se termina de explicar con la apertura de su nueva sede, el “100 Thieves Cash App Compound”, de unos 1.400 metros cuadrados, ubicado en el corazón de Los Ángeles, ciudad donde tiene la sede. Según un comunicado que lanzó el propio equipo, su nuevo cuartel general es el más grande de los EE. UU. y representa “un nuevo punto de referencia para una sede de esports de ensueño, que incluye espacios para entrenamientos específicos, para la retransmisión de videojuegos en vivo, para la producción de contenidos, el diseño de moda y hasta una tienda para las próximas colecciones de ropa de la marca.”
El comunicado del equipo sigue con algunas declaraciones de su CEO, Matthew “Nadeshot” Haag, que explica que “el 100 Thieves Cash App Compound es el producto de nuestra visión de construir un nuevo tipo de compañía, una marca que refleja un estilo de vida nacido del gaming”. Haag completa el comunicado diciendo que “Los Ángeles es el epicentro de los deportes electrónicos, el entretenimiento y la moda, que son los tres pilares sobre los que fundamos la empresa, por lo que éste es el hogar perfecto para innovar en lo que puede ser una organización de esports y una marca de estilo de vida. Estoy ansioso porque nuestros fanáticos experimenten el Compound.”
Más allá de la apertura de su nueva sede, lo cierto es que al entrar en la página web de 100 Thieves, cuesta saber si es un club de esports o, como se mencionaba antes, una tienda de ropa. Con una ausencia absoluta de algo que haga recordar a la actividad deportiva, la home de la web es un muestrario de productos de moda como sudaderas, las famosas hoodies, camisetas, camisas, calcetines, gorras, llaveros y otros tantos productos que parece que nos hemos equivocado de sitio. Es más, al desplegar la pestaña “Shop”, se pueden ver 7 nombres de colecciones de moda diferentes, una de ellas muy relacionada con Los Ángeles -haciendo gala del orgullo de la compañía por pertenecer a esta región-, antes de llegar a la que se denomina “2022 Primary jersey”, que es donde, por fin, se puede acceder a su camiseta oficial.
Eso sí, después de mucho buscar, uno puede acceder a la información de sus equipos profesionales, bien abajo en el footer de su web, donde se vuelve a tener la sensación de estar hablando de esports y no de moda.
Es interesante la estrategia de 100 Thieves, que ha dado un vuelco completo al planteamiento de un equipo, hasta ahora, normal, siendo fiel a la visión de ser una compañía relacionada con un estilo de vida, creada a partir del gaming y que, para más inri, no ha cerrado ningún acuerdo con marcas deportivas o de moda, lo que significa que el diseño y la producción es propia, cosa que no sucede con la mayoría del resto de equipos.
La verdad es que este nuevo posicionamiento de 100 Thieves tiene varias aristas de reflexión. La primera pasa por el propio posicionamiento: su asociación con las 3 características propias de la ciudad de Los Ángeles (epicentro de los deportes electrónicos -cabe recordar que hay varios equipos muy importantes en dicha ciudad-, el entretenimiento y la moda), y su vinculación con una forma de vida gamer. Esto tiene todo el sentido: ¿quién mejor que ellos para unir los 3 vértices de este triángulo equilátero (o isósceles) que identifica a la ciudad?
La segunda tiene que ver con la capacidad de un equipo para convertirse en una empresa textil exitosa. Es decir, más allá de que la fanbase existe y que, en cierto punto, puede tener un grado alto de fidelización, ¿será esto suficiente como para asegurar un mercado mínimo que permita alcanzar el objetivo de la diversificación?
Ya, la última y algo trasnochada… ¿Afectará esto a los criterios de captación de jugadores? Es decir, ¿de ahora en adelante elegirán a los mejores jugadores o también tendrán en cuenta qué tal les queda la última colección? No… es broma. A quién puede no quedarle bien las hoodies.
Imagen: 100Thieves