Analizamos las principales tendencias en el sector del Sports and Entertainment de cara al año que está a punto de empezar
DICIEMBRE | TAGS: sports, entertainment
Falta muy poco para que termine un año 2021 que, aunque ha seguido a la sombra del coronavirus, ha estado marcado por la recuperación en prácticamente todos los sectores. El del Sports & Entertainment no ha sido excepción, y, gracias al regreso de los eventos, del público a los estadios o de la música en directo, se puede decir que, si bien no al 100% y con algunos sustos, somos los de antes de la crisis.
Y ahora toca, cómo no, mirar a 2022 y empezar a planificar
un año que, con total seguridad, será aún mejor. Pero, ¿qué nos espera a partir
del próximo uno de enero? Veamos algunas de las tendencias que marcarán esta
área desde ya mismo.
Consolidación del Sportainment
El deporte es, sin duda, uno de los entretenimientos
favoritos de los ciudadanos de todo el mundo. Hablamos de practicarlo o…
seguirlo como aficionado. Por ese motivo, en los últimos tiempos han
proliferado los documentales de deportistas, las películas sobre hazañas
atléticas o, incluso, la retrasmisión en streaming de competiciones por
plataformas tradicionalmente exclusivas de cine o series.
En este sentido, Twitch marcó un punto de inflexión al retransmitir, en directo, el debut de Lionel Messi como jugador del PSG o la reciente Copa América, tal y como nos contó nuestro compañero Juan Arano en su “mirada disruptiva”.
Una tendencia que se va a afianzar a corto plazo, y que será
extensible al consumo durante los eventos presenciales. De hecho, los nuevos
proyectos de estadios, véase el nuevo Santiago Bernabéu, ya piensan en una
experiencia inmersiva para el espectador que va más allá del partido en sí.
Algo que podemos ampliar también a la música, que durante los momentos más duros de la pandemia tuvo que cambiar los escenarios por las pantallas, y que seguirán aprovechando este soporte para llegar a más personas en todo el mundo.
Engagement y contenido social
Los datos revelan que casi el 80% de la población mundial sigue el deporte en cualquiera de sus disciplinas. Un dato que nos marca el reto de monetizar ese engagement de los fans ofreciendo las mejores experiencias en los estadios o encontrando ideas creativas para aquellos que consumen deporte desde la comodidad de su casa.
También será, con la sensibilización de la población mundial a causa de la Covid-19, la época de los patrocinios con contenido social, que estarán muy ligados a la reputación de la marca. No es algo nuevo, pues desde hace años este tipo de estrategia ha llegado cada vez más al marketing de las marcas como una forma de representar la empatía con los consumidores.
Colaboración con influencers
Una cara conocida ayuda a la venta. Se trata de una estrategia muy antigua y que ahora cuenta, cada vez más, con la presencia de influencers. No solo por su capacidad para conectar con el público más joven, sino porque están en las plataformas más demandadas por los responsables de marketing de las empresas: las redes sociales. Por ello, es previsible que a lo largo de 2022 veamos cómo las marcas más prestigiosas se unen a creadores de contenido en Tik Tok o Instagram para posicionarse en este nuevo paradigma.
Eventos híbridos, aquí para quedarse
La pandemia obligó a cancelar o suspender cientos de eventos. Algunos se han conseguido celebrar después de la crisis sanitaria, pero muchos otros se reinventaron y se llevaron a cabo de manera virtual. Un formato, el del streaming, que ha calado en muchos sectores y que se mantendrá, aunque en formato híbrido con el presencial, en el corto plazo.
Tal y como nos contó Eric Mottard, “lo online servirá como complemento”, y cree que podemos sacar buenas prácticas de la lección aprendida, realizando por ejemplo “sesiones virtuales de debate previas a un evento presencial como ‘presentación’ del mismo, para ‘calentar a la audiencia’ y para aportar información adicional”.
El enésimo superávit de los eSports
Tal y como ya vimos en este blog, los eSports fueron una de las industrias que crecieron durante la pandemia y su curva seguirá en ascenso también en 2022, superando la marca de los 2.500 millones de dólares en ingresos.
Mientras que en 2020 los porcentajes de ingresos brutos gestionados por la industria global de los eSports eran de unos 1.100 millones de dólares, en 2021 esas cifras han crecido exponencialmente, con proyecciones realizadas por expertos del sector que sitúan a la industria global del juego competitivo en 1.800 millones de dólares de ingresos.
Porque los niveles de audiencia se han incrementado de manera espectacular en todo el mundo, así como el alcance global que aportan los productos basados en los eSports, pasando por los juegos, los complementos, los artículos especiales para equipos y jugadores, y las plataformas de streaming.